«Mal… ¡Mal! ¿Por qué lo tocas, si estaba bien?». Esta frase de un conocido sketch del programa de humor Muchachada Nuí viene que ni pintada para comentar un tema muy criticado por la comunidad, y del cuál quiero hacer mi propia aportación: la evolución de los diseños de personajes de videojuegos y, en concreto, cómo en algunos casos el resultado queda muy por debajo del original. Todo lo que voy a decir, por supuesto, es totalmente subjetivo y mi opinión no ha necesariamente de coincidir con la vuestra…
Empezaré por uno de los casos, digamos, más importantes dentro del mundillo: Sonic, The Hedgehog. Ante todo he de decir que no todas las evoluciones que ha sufrido el personaje (y los que le acompañan) han sido un desastre pero lo cierto es que su más moderna apariencia en Sonic Boom ha recibido duras críticas, y no sin razón.
En la imagen podemos ver cómo el personaje ha sido poco a poco dotado de una apariencia más estilizada, muy diferente del aspecto rechoncho con el que se dio a conocer al mundo. Como digo, el cambio en las proporciones no es del todo malo pero lo que sí pienso que le sobra son ese pañuelo al cuello y todos los vendajes que le añadieron en su última encarnación. Del resto de personajes, y en especial el Knuckles en plan culturista, mejor ni hablo…
No sé qué pensaréis vosotros del siguiente ejemplo que voy a exponer, aunque me lo podéis decir luego en los comentarios, pero lo cierto es que el «nuevo» diseño (lo entrecomillo porque ya tiene algo de tiempo) me parece horrible. Estoy hablando de Rayman, personaje de Ubisoft que fue icono no solo de la compañía, también de un periodo de tiempo concreto y, si bien no llegó en su momento a las cotas de fama que tuvieron otros, sí que ha conseguido perdurar hasta hoy.
Dejando a un lado el modelado poligonal, que carece del nivel de detalle que tanto el original como el más reciente poseen por ser diseños bidimensionales, para mí los trazos fáciles y planos de este último no están ni mucho menos a la altura de un dibujo mucho mejor terminado, con más sensación de volumen, más simpático y expresivo. Rayman es, en mi opinión, un claro ejemplo de que cuando algo nace bueno, no hay que tocarlo…
Ya para finalizar este post voy a mencionar el caso de un juego que todavía no ha visto la luz. Los creadores de Monster Boy and the Cursed Kingdom, considerado un sucesor espiritual de la gran saga Wonder Boy, sacudieron el ánimo de los fans cuando, con el juego ya en un supuesto estado de desarrollo muy avanzado, decidieron cambiar por completo el diseño de los personajes, generando con ello un intenso debate y una disparidad de opiniones como pocas veces se ha visto.
En la imagen vemos ambos diseños, el «antiguo» arriba y el «nuevo» abajo. Juzgad por vosotros mismos si el cambio ha sido o no acertado. Personalmente me gusta bastante más el superior y, como mucha gente, recibí como un jarro de agua fría la noticia. Ello no tiene por qué hacer que el juego sea peor aunque, como es obvio, el pensamiento de cómo podría haber sido con los diseños originales siempre va a estar ahí.
Hay muchos más casos, y exponerlos todos daría para muchos posts. Quizá en el futuro vuelva sobre el tema pero creo que, por ahora, estos son ejemplos bastante representativos de que no siempre se atina a la hora de cambiar la apariencia de un personaje de videojuego.