Botany Manor

Cuantos de nosotros, sumidos en nuestra vorágine particular, no añoramos ese instante de relax que nos desconecte de todo. Botany Manor, el juego que analizaré a continuación, es perfecto para esto. Nada de enemigos, de acción, de tensiones continuas. Solo exploración y puzzles no muy complejos dentro de una bonita mansión enclavada en un punto perdido de la campiña inglesa…

En Botany Manor asumimos el papel de Arabella Greene, una botánica retirada que tras viajar por todo el mundo regresa a la mansión familiar con el objetivo de plasmar su investigación en un libro. Para ello deberá cultivar diversas plantas, cada una con sus características propias de crecimiento y floración.

Encontrar información al respecto y llevar a cabo la germinación de las plantas es la base sobre la que se asienta la propuesta jugable de este título, si bien no será lo único que hallaremos a medida que nos vayamos abriendo camino por las múltiples estancias y zonas de jardín que hay en la mansión. También conoceremos detalles de la vida de la protagonista y su servidumbre, aunque en ningún momento les veremos físicamente a lo largo del desarrollo del juego.

Todo esto implica una profunda exploración, el otro pilar importante de Botany Manor junto a los puzzles. Así, mucho de lo que encontremos servirá de pistas para completar la información del libro. En este sentido, Botany Manor facilita mucho la búsqueda al destacar, primero con un punto y luego con un contorno blanco, aquellos objetos con los que será posible interactuar.

A nivel gráfico, Botany Manor presenta unos coloridos entornos que, salvando las distancias, recuerdan a lo visto en títulos como Rime o Beyond Eyes. Solo la iluminación ambiental muestra cierto grado de realismo frente a unos modelados sencillos pero correctos para el estilo que se ha querido utilizar.

En cuanto al apartado sonoro, la música que nos acompañará durante buena parte del juego encaja a la perfección con el ambiente y contribuye a generar esa sensación de relajación que se busca transmitir en todo momento. Botany Manor carece de voces y los textos plasmados en documentos aparecen en inglés pero es posible leerlos sin formato traducidos al español. Es curioso, no obstante, que otros elementos gráficos como los carteles y las placas de las puertas sí hayan tenido en cuenta el cambio de idioma.

Botany Manor no pretende ser otra cosa que lo que es: una experiencia relajada, ideal para desconectar como dije al inicio de cualquier atisbo de tensión. Y lo consigue con creces, siempre y cuando el usuario se tome su tiempo para disfrutar de la actividad a realizar en un ambiente que, desde luego, invita a ello. Un título sumamente recomendable para quienes busquen justo lo que ofrece.

Si me gustan los puzzles, la exploración y los ambientes como el que presenta Botany Manor, ¿qué podía salir mal? La respuesta, en efecto, es nada. En consecuencia, me alegra poder decir que he disfrutado de una experiencia a la que no me importaría volver en un futuro, cuando el cuerpo y la mente me pidan descansar de otras más estresantes.