Soy fan de la saga, a pesar de lo frío que me dejó el final de su tercera entrega. Syberia es y será siempre para mí una historia muy especial, una historia de transformación, una que te hace descubrir al mismo tiempo que la protagonista que hay cosas sumamente importantes en la vida que nuestra rutina habitual a menudo no nos permite ver ni conocer. Por eso cuando, de una manera totalmente inesperada, se anunció The World Before, esa ilusión por volver a su universo me cautivó pero, por desgracia, todo acabó también ahí porque no se ha vuelto a saber nada de dicho juego…
Ha pasado mucho tiempo desde aquel 19 de agosto de 2019, en el que se daba a entender que la saga iba a regresar a su esencia original, y no es que el tercer juego cambiase mucho en su mecánica aunque sí lo hiciera en lo técnico, pasando de unos escenarios pre renderizados a otros tridimensionales pero en lo básico seguía siendo el mismo.
Lo que sí me pareció un detalle importante y que invitaba al optimismo fue que, en el momento del anuncio, se dijo que el juego llevaba ya 18 meses en desarrollo, si bien es imposible saber si ese tiempo se refería al trabajo de programación o desde la creación de los primeros conceptos. Sea como fuere ese año y medio, sumado a los meses que han pasado desde entonces, es mucho tiempo para que no se haya mostrado absolutamente nada nuevo.
No hablamos de vídeos de gameplay, ni trailers. Es que no hay ni siquiera una imagen del juego en sí o de un diseño conceptual, aparte del que se utilizó para la primera noticia (y única hasta ahora). Es por esto que llevo un tiempo pensando sobre cuál será el verdadero estado del proyecto, y no son pocas las cosas que se me han pasado por la cabeza y que voy a tratar de exponer comenzando por la más terrible de las posibilidades: su cancelación.
Es inevitable, tras tanto tiempo de incertidumbre y conociendo otros precedentes, que dicha idea ronde. Sin embargo, un vistazo a las redes sociales, y más en concreto al perfil de Twitter de la saga, parece evidenciar que The World Before sigue vivo. Aun así escama mucho que no se haya enseñado nada todavía, si bien ello puede deberse a un deseo del autor de no hacerlo hasta el último momento o, al menos, hasta que no esté lo suficientemente pulido o bien que, como ya sucedió con Syberia 3, hayan surgido diversos contratiempos durante el desarrollo que hayan obligado a cambiar cosas, retrasando el resultado final.
Sin embargo, con lo que todos sabemos, a día de hoy otra opción podría ser la de que se estuviera preparando dicha entrega para la nueva generación. Ello no tendría por qué excluir a los sistemas actuales, y de hecho pienso que sería un error hacerlo teniendo en cuenta el parque de consolas existente en el mercado pero, como ya ocurriera en el pasado con, por ejemplo, The Last Guardian, no es ni mucho menos una idea descabellada.
Volviendo a la primera posibilidad, no hablaré ya de cancelación pero sí de un parón obligado por la urgencia de otros proyectos y, por supuesto, por la crisis del coronavirus que todos estamos padeciendo en mayor o menor medida desde hace ya un tiempo. Esto último quizá sea lo menos creíble por la propia naturaleza del trabajo de desarrollador, que puede seguir con su labor de manera remota perfectamente y prueba de ello son todos los demás juegos que siguen adelante, aunque sea con algún que otro retraso.
Dejando a un lado el enfoque que le puedan dar a la historia, dado que a mi ver el final del tercer juego parecía dejarlo todo cerrado para la protagonista, no ocultaré que a día de hoy sigo esperando noticias de The World Before, uno de los pocos títulos que, y esto es lo más curioso, ha acaparado mi atención sin haber mostrado nada, a diferencia de tantos otros de los que se habla continuamente y que no despiertan en mí el menor interés. Parece pues que solo se puede hacer una cosa: seguir esperando y confiar que, más pronto que tarde, salga a la luz información interesante sobre este juego y, con suerte, el anuncio de su pronta salida para poder adquirirlo y, estoy seguro o ese es mi deseo al menos, disfrutarlo tanto como lo he hecho hasta ahora con sus predecesores.