Los cazafantasmas: el videojuego

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No despiertan en mí el sentimiento que produce, por ejemplo, la saga “Shenmue” pero sí, me considero un fan de “Los cazafantasmas”. Eso sí, de los originales, no la abominación que hicieron recientemente. Ahora se ha conocido la noticia de que se pretende llevar a cabo la realización de una nueva entrega con los personajes que todos conocemos. Creo que no es el primer intento y, sinceramente, veo complicado que dicho proyecto vaya a materializarse. Además, tengo mis dudas sobre qué podría salir de ahí y casi prefiero que no lo haga…

Pero el post de hoy es para hablar de ese videojuego que homenajeó las películas clásicas como nadie antes lo había hecho. Con un argumento que cierra el círculo en torno al personaje de Ivo Shandor que, como recordaréis quienes hayáis visto la primera película, fue el arquitecto que construyó el edificio en el que vive Dana Barrett y donde en cuya cúspide tiene lugar el enfrentamiento final con Gozer, a nivel de guión yo personalmente considero a “Los cazafantasmas: el videojuego” como la perfecta tercera parte y final épico de la historia de sus protagonistas.

“Los cazafantasmas” no es solo un muy buen juego en ese aspecto. También lo es en lo que se refiere al juego en sí mismo, es decir, en su jugabilidad y los retos que ofrece al jugador. Con una vista en tercera persona a lo “Gears of War” (con el personaje a un lado y la cámara un poco por encima del hombro derecho), encarnamos a un nuevo miembro del grupo, un novato que ansía poder formar parte de la leyenda. Y no habrá que esperar mucho para demostrar de qué pasta estamos hechos cuando, a modo de tutorial, tengamos que cazar a nuestro primer fantasma en los mismos sótanos del cuartel general.

La clave del juego, la caza de fantasmas, se divide en tres fases. La primera consiste en agotar al ente disparando el rayo de manera continuada contra él. La siguiente es atraparlo con dicho rayo, pudiendo también entonces golpearlo contra el suelo para noquearlo y la tercera, abrir la trampa y mantenerlo dentro del haz de luz hasta que el sistema lo absorba. Parece complicado en un principio pero es muy intuitivo y se hace sumamente divertido. Sin embargo, habrá enemigos a los que habrá que “matar” de manera diferente pero la mayoría deben ser “cazados”.

Capturar fantasmas nos dará dinero que podremos invertir en mejorar el equipo que llevemos en ese momento, pero también lo podremos obtener localizando objetos “poseídos” gracias al medidor de energía psico-quinética. Cuando lo utilicemos, el escáner nos mostrará lo que hay a nuestro alrededor en tres colores diferentes: verde, que significa que no hay nada, rojo para la presencia de un fantasma próximo y azul para los objetos antes mencionados.

Entrando ya en lo técnico, tanto escenarios como personajes lucen un genial acabado. En especial los protagonistas, que fueron fielmente recreados, sobre todo en las secuencias generadas por ordenador. Además, los entornos son destructibles hasta cierto punto y será muy fácil dejar nuestra impronta en forma de quemaduras en las paredes y un montón de destrozos, cuyo valor en daños también será contabilizado en el juego. De hecho, hay un par de logros/trofeos en este sentido…

En lo sonoro, se utilizaron gran parte de las melodías más famosas y el doblaje corrió a cargo de las mismas personas que trabajaron en su momento en dicha labor, lo que hace que casi estemos viendo una de las películas si bien es cierto que personajes como Janine Melnitz no quedaron especialmente bien. Pero, en lineas generales, el trabajo en este apartado es a mi juicio bastante notable.

He de decir que en su momento eché en falta la presencia, en la oficina, de Louis Tully, y de la novia de Peter, Dana. Lo cierto es que Sigourney Weaver estuvo a punto de estar en el juego pero por problemas de agenda no pudo participar y, cuando quiso hacerlo, la historia ya estaba cerrada con otro personaje cuya voz (y aspecto) son de la también actriz Alyssa Milano. A pesar de todo, y como dije al principio, el argumento del juego esta al nivel del de las películas y ello, unido a sus virtudes técnicas y jugables, hacen que tanto si sois fans de estos personajes y sus andanzas como si no, a buen seguro disfrutaréis de una experiencia muy divertida.

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