A estas alturas cuesta innovar de una u otra forma en cualquier género del videojuego. Se mejora en lo técnico, se da una vuelta de tuerca a mecánicas conocidas ya sea cambiando la perspectiva de la cámara o añadiendo opciones pero, al final, a grandes rasgos acaba siendo lo mismo. Por eso, cuando aparecen propuestas que se salen de lo habitual conviene prestar un poco de atención porque pueden sorprender, y eso es lo que consiguió provocar en mí este Perception del que voy a hablaros hoy.
¿Y qué hace diferente a Perception de otros títulos, en este caso del género de terror? Pues ni más ni menos que el hecho de que su protagonista, una joven llamada Cassie, sea ciega. Viviremos su angustia en primera persona mientras nos movemos por una vieja casa a la que ha acudido en busca de respuestas a una serie de pesadillas recurrentes que la atormentan. La trama va tomando forma gracias a diversas grabaciones de audio, textos que Cassie “lee” gracias a una aplicación especial de su teléfono móvil y a los “recuerdos” que llegan a su mente al interactuar con ciertos objetos.
Cassie es, como he dicho antes, ciega pero puede “ver” a través del sonido. Para ello hay que hacer uso del bastón, cuyos golpes producirán ondas que rebotarán contra los objetos cercanos, revelando su forma, lo que los hace visibles para el jugador. Esto no obstante durará pocos segundos salvo en el caso de las puertas y otros lugares y objetos importantes, que quedarán permanentemente marcados en un color diferente al resto. En algunos de estos últimos será posible esconderse para evitar ser vistos. Por lo general todo se muestra en un tono azulado pero este cambiará, pasando a naranja, siempre que nos vayamos a enfrentar a algún peligro. Los antes mencionados objetos que queden marcados aparecerán en un verde brillante que resalta con fuerza, pudiendo ser visto incluso desde la distancia. Por otra parte, aquello que sea vital para avanzar en la historia aparecerá iluminado en blanco.
Pero por si estar prácticamente a oscuras no fuera suficiente para generar tensión en la protagonista y por ende en el jugador, otras amenazas recorren la casa siendo la peor de todas la Presencia, un ente que nos acecha de manera continua, que nos perseguirá sin descanso si nos ve y contra el que es imposible hacer nada por lo que la única opción de supervivencia es salir corriendo y esconderse. La Presencia será atraída por el ruido que hacemos con el bastón, por lo que no conviene abusar de su uso, si bien también se cruzará con nosotros en momentos puntuales de la historia y sabremos que se aproxima cuando, repentinamente, el entorno pase del color azul grisáceo habitual a un rojo intenso.
Dada la condición de la protagonista, el aspecto gráfico de Perception no es lo que estamos acostumbrados a ver en un juego, sea de terror o de cualquier otro género. Este título ofrece una para mí interesante mezcla de luz y sombra en la que aún con limitaciones es posible llegar a apreciar diferentes texturas y efectos como el del viento o las ondas producidas por aquellos aparatos que emiten algún sonido. Por otra parte, los escenarios son más variados de lo que uno podría esperar, teniendo en cuenta que el lugar en el que transcurren los hechos no es especialmente amplio, y están muy bien diseñados y repletos de detalles.
El apartado sonoro es quizá lo menos trabajado del juego pero ello no quiere decir que sea malo. No hay música de fondo que ambiente el momento que estemos viviendo pero tampoco es un elemento necesario en este caso puesto que los sonidos propios de la casa junto a los provocados con nuestras acciones y aquellos que llamen nuestra atención en instantes puntuales se bastan y sobran para provocar más de un susto. Las voces están en inglés pero viene subtitulado a nuestro idioma, lo que por supuesto siempre se agradece y más cuando seguir la trama es algo tan importante.
Reconozco que, al menos estos últimos años, he rechazado a menudo los grandes juegos porque no termino de encontrar en ellos ese “algo” especial que sí encuentro a veces en producciones menores. Perception es un claro ejemplo que me cautivó desde el primer momento en el que supe de él. Tanto que lo he jugado ya muchas veces, algo a lo que ayuda que no sea muy largo y es que en mi opinión, y no es la primera vez que lo digo ni será la última, las buenas experiencias no tienen porque vivirse solo una vez. Si os gusta el género de terror y no lo conocíais o se os había pasado de largo, creo que disfrutaréis de su propuesta si le dais esa oportunidad a la que siempre invito en mis análisis.