Mucho nos quejamos de que los videojuegos ya no están "completos" de inicio pero somos nosotros los que, al comprarlos, hemos permitido que esto sea así...
El espíritu de los viejos arcades de los 90 parece haber caído en el olvido, y en este post reflexiono sobre si es algo que se ha perdido o puede volver.
Jugar conectado a la red tiene sus ventajas pero también sus inconvenientes, y uno de ellos es el continuo y férreo control al que nos tienen sometidos...
¿Sois de los que rejuegan mucho los juegos o de los que pasan de uno a otro sin sacar todo el jugo? Según sea la respuesta seréis de una u otra "especie".